Un operativo policial en la ciudad de Trujillo logró descubrir un local nocturno donde se ejercía la prostitución clandestina, interviniendo a varias adolescentes loretanas que fueron llevadas con el engaño de un trabajo seguro y bien remunerado.
Todo se inició en abril con la denuncia que presentó Belén, una mujer de 46 años de edad, en la Sección de Trata de Personas de la DIVINCRI, donde señaló que aquella vez dos tipos desconocidos se acercaron a comprar en su bodega de la localidad de Mazán, río Amazonas.
Al día siguiente fueron nuevamente, siendo atendidos por su hija menor de 16 años. Entablaron una conversación sin imaginar que estos sujetos se llevarían con engaños a su hija a la ciudad de Lima.
La madre se enteró por medio de un mensaje de texto que le envió la adolescente.
Con esta denuncia, la Policía de Iquitos trabajó para ubicar el paradero de la menor, hasta que lo consiguieron el último fin de semana.
El operativo fue montado con los agentes policiales de Lima y Trujillo, así como la participación del Ministerio Público, interviniendo a Eugenia Vásquez Pingo y Alfredo Polo Velásquez, quienes son investigados por los delitos de trata de personas y proxenetismo.
En el inmueble de la ciudad de Trujillo, los agentes detuvieron a 13 presuntos proxenetas del grupo de mujeres, entre mayores y menores, quienes ejercían la prostitución, no se sabe si por voluntad o por amenazas de los detenidos.
La DIVINCRI de Iquitos informó que los sujetos inscribían a las mujeres en la RENIEC con partidas de nacimiento falsas para que tengan mayoría de edad.
Estas mujeres eran reclutadas en su mayoría en Loreto.
Entre los intervenidos están tres menores de edad, dos de 16 años y una de 14. Una de ellas, es la adolescente de Mazán, que escapó del local y denunció a Percy Núñez Quinde o José Núñez Quinde, quien la llevó con engaños a Trujillo.
Según la policía, esta persona se encontraría actualmente en Iquitos reclutando más mujeres para llevarlas al norte del país y prostituirlas.
