Según el Reglamento de la Ley Nº 28950 contra la trata de personas y el tráfico ilícito de migrantes (Título III, Cap. I, Art. 14), el Ministerio de Transporte y Comunicaciones, tiene la obligación de emitir directivas a fin que los transportistas exijan la presentación del DNI o Partida de Nacimiento y en su caso autorización de viaje, para la expedición de los boletos de viaje de menores de edad.
Sin embargo, en un monitoreo realizado por MIRADA CIUDADANA, primera veeduría contra la trata de personas, tráfico ilícito de migrantes y personas desaparecidas, sólo en los dos primeros meses del año, por lo menos 43 menores de edad han sido trasladados con engaños para ser víctimas de trata de personas, sin ningún control en las carreteras y en las propias agencias de transportes.
En cuanto al perfil de las víctimas, tenemos a adolescentes mujeres entre 12 y 16 años y niños varones entre 2 y 12 años.
Las principales rutas de traslado son: Tacna – Puno; Huancayo – Huancavelica – Lima; Puno – Lima; Chiclayo – Cajamarca; Pucallpa – Tacna; Lima – Junín; Puno – Arequipa – Moquegua; Tacna – Moquegua; Apurímac – Lima, Tarapoto-Trujillo.
Esto indicaría que la trata de personas, en la zona sur del país, al igual que la Amazonía, es una de las zonas más vulnerables para potenciales víctimas de trata, con el agravante que esto estaría pasando desapercibido por el Estado.
En cuanto a los medios de transporte, el principal sería el terrestre, aunque no hay dejar de lado el uso de motonaves por la vía fluvial, como sucede en la ruta Iquitos – Pucallpa – Moquegua - Tacna.
La situación descrita, se agrava si tomamos en cuenta el gran número de pasajeros que se trasladan año a año, sin que exista un control de cuántos son menores de edad se trasladan con extraños; según estadísticas del Ministerio de Transportes y Comunicaciones, en el año 2007 se registraron 63´065,931 pasajeros en el transporte interprovincial terrestre, siendo Lima con 20´749,020 la que mayor cantidad de pasajeros generó, seguida de Arequipa con 6´445,748. Los viajes se realizaron con algunas de las 5,275 empresas de transporte interprovincial.
Entonces, habría que preguntarse ¿Cuántos de estos pasajes correspondieron a menores de edad que fueron captados y trasladados por extraños para ser víctimas de diversos delitos? ¿Cuántos de ellos, pasaron por puestos de control sin que se les solicite la autorización de viaje correspondiente? ¿Cuántos menores de edad más, seguirán siendo víctimas hasta que el Ministerio de Transportes y Comunicaciones decida dar las Directivas necesarias para controlar el traslado de menores de edad?
Sin embargo, en un monitoreo realizado por MIRADA CIUDADANA, primera veeduría contra la trata de personas, tráfico ilícito de migrantes y personas desaparecidas, sólo en los dos primeros meses del año, por lo menos 43 menores de edad han sido trasladados con engaños para ser víctimas de trata de personas, sin ningún control en las carreteras y en las propias agencias de transportes.
En cuanto al perfil de las víctimas, tenemos a adolescentes mujeres entre 12 y 16 años y niños varones entre 2 y 12 años.
Las principales rutas de traslado son: Tacna – Puno; Huancayo – Huancavelica – Lima; Puno – Lima; Chiclayo – Cajamarca; Pucallpa – Tacna; Lima – Junín; Puno – Arequipa – Moquegua; Tacna – Moquegua; Apurímac – Lima, Tarapoto-Trujillo.
Esto indicaría que la trata de personas, en la zona sur del país, al igual que la Amazonía, es una de las zonas más vulnerables para potenciales víctimas de trata, con el agravante que esto estaría pasando desapercibido por el Estado.
En cuanto a los medios de transporte, el principal sería el terrestre, aunque no hay dejar de lado el uso de motonaves por la vía fluvial, como sucede en la ruta Iquitos – Pucallpa – Moquegua - Tacna.
La situación descrita, se agrava si tomamos en cuenta el gran número de pasajeros que se trasladan año a año, sin que exista un control de cuántos son menores de edad se trasladan con extraños; según estadísticas del Ministerio de Transportes y Comunicaciones, en el año 2007 se registraron 63´065,931 pasajeros en el transporte interprovincial terrestre, siendo Lima con 20´749,020 la que mayor cantidad de pasajeros generó, seguida de Arequipa con 6´445,748. Los viajes se realizaron con algunas de las 5,275 empresas de transporte interprovincial.
Entonces, habría que preguntarse ¿Cuántos de estos pasajes correspondieron a menores de edad que fueron captados y trasladados por extraños para ser víctimas de diversos delitos? ¿Cuántos de ellos, pasaron por puestos de control sin que se les solicite la autorización de viaje correspondiente? ¿Cuántos menores de edad más, seguirán siendo víctimas hasta que el Ministerio de Transportes y Comunicaciones decida dar las Directivas necesarias para controlar el traslado de menores de edad?
Extraído del Diario La República
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