En el marco del Día Mundial contra la Trata de Personas, que se conmemora el 30 de julio, se ha identificado que en el país existen varias falencias para combatirla, lo cual se agravó aún más debido a la pandemia.
La trata de personas es un problema álgido que ocurre en muchas sociedades alrededor del mundo, y que afecta en su mayoría a mujeres. Este delito es considerado como la esclavitud del siglo XXI, en el que los captores se aprovechan de la condición de vulnerabilidad o desconocimiento de su víctima para coaccionarla y obligarla a cumplir una actividad ilegal.
En el Perú se reportó que durante el 2019, el 93,5 % de los casos de denuncia por trata eran conformados por mujeres, mientras que un 6,5 % eran hombres. Esta problemática puede haber sido eclipsada por la cuarentena instituida para evitar los contagios de coronavirus, ya que la labor de la Policía Nacional y el Ministerio Público se ha visto limitada por la coyuntura. Sin embargo, es un problema latente.
Como todos los 30 de julio, se conmemora el Día Mundial contra la Trata de Personas, por lo cual La República ha realizado una radiografía sobre la situación actual de este flagelo y su continuidad frente a la nueva normalidad.
Ausencia de un sistema integral de información sobre la trata de personas
Uno de los principales problemas para el monitoreo de las denuncias y las cifras sobre la trata de personas según Ricardo Valdés Cavassa, director ejecutivo de CHS Alternativo, es la carencia de un sistema unificado de la data sobre el tema.
“Todas las unidades del Estado dan cifras distintas, con eso es muy difícil establecer una política pública o inclusive campañas de prevención. Si no tenemos una información unificada, difícilmente vamos a ver quiénes son las víctimas, de donde proceden, qué rutas han seguido o qué tipo de explotación es la que han tenido”, indicó.
Fuente: La República