La trata de personas dejó de ser una actividad ilícita que se realiza en las zonas más alejadas del país para asentarse entre nosotros, prueba de ello es que Lima es la ciudad donde se reportan más casos de este tipo.
El caso más reciente descubierto en la capital fue el de 10 jóvenes, entre ellos dos menores de edad, traídos a Lima desde Pucallpa con el cuento de trabajo seguro.
Isaías Ventura Trinidad les ofreció el pago de 30 soles por día para que viajarán a Cusco a trabajar en una chacra de papayas.
La denuncia de un familiar de uno de los menores de edad, presentada a comienzos de este mes, permitió a la Policía rescatar a los jóvenes de una vivienda en el distrito de Santa Anita e iniciar una investigación para desbaratar a una red de traficantes de personas.
Al segundo trimestre del este año se registraron en nuestro país 201 casos de trata de personas en el país, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), mientras que entre el 2008 y el 2012 hubo un total de 1112 casos.
Lima, Loreto y Madre de Dios registraron el mayor número de casos, entre los que destacan la explotación sexual, la explotación laboral y la mendicidad.
Los casos más críticos se registran en Madre de Dios, como en la zona denominada La Pampa, donde los tipos más comunes de trata de personas están ligados a la minería ilegal, con fines de explotación sexual y de explotación laboral, según un estudio realizado por Promsex.
EN CAMPAÑA. Ante esta problemática, el Ministerio de Justicia ha iniciado una campaña nacional en los colegios contra la trata de personas en la que pone énfasis en los menores de edad, a quienes advierte sobre las nuevas formas de captación de los tratantes, a través de las redes sociales, con falsas promesas de empleo.
Según las estadísticas que maneja dicho portafolio, ocho de cada diez víctimas de trata son menores de edad, entre los 13 y 17 años.
Este sector de la población es más vulnerable por el desconocimiento de las características de este delito por parte del 80% de la población escolar.
"Se busca que los escolares tomen conciencia de los riesgos a los que están expuestos", explicó Ernesto Lechuga, director general de Defensa Pública y Acceso a la Justicia.
POCAS SENTENCIAS. Flavio Mirella, representante de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDC), reconoció que en octubre de 2011 el Gobierno lanzó un plan contra la trata de personas, que consideraba un mayor número de jueces, fiscales y policías. Sin embargo, advirtió que faltan fiscalías especializadas.
"No es posible que en más de 10 años solo hayan 10 sentencias por trata de personas. Lo que pasa es que la problemática se da en zonas muy alejadas de la capital y el respaldo para este tipo de investigación no es de lo más adecuado", dijo.
Aunque felicitó los avances en el marco legal y en la creación de más conciencia a nivel del sistema educativo, Mirella advirtió que existen muy pocos servicios para la víctima en el país. "No hay casas de acogida donde existan las condiciones para garantizar la reinserción de las víctimas en la sociedad", manifestó.
TOMA EN CUENTA. Para reclutar a sus víctimas, los tratantes de personas utilizan diferentes métodos y recurren a las agencias de empleo, agencias matrimoniales, redes en el entorno de los colegios, padrinazgo, falsos avisos en los medios de comunicación, seducción, agencias de modelos, rapto o secuestro, internet y las redes sociales, como Facebook y Twitter.
Los traficantes de seres humanos se aprovechan de las personas que están buscando una oportunidad para mejorar su situación económica o laboral, atrayéndolas con ofertas engañosas.
