Jóvenes indígenas de América Latina se reunirán en Lima para abogar por la prevención del embarazo adolescente.
Mujeres indígenas son víctimas de violencia sexual a consecuencia de conflictos armados y la trata de personas.
Como antesala al Día Mundial de la Población, este miércoles, jóvenes indígenas de 10 países de Sur y Centro América se reunirán en Lima para elaborar recomendaciones con el fin de prevenir el embarazo adolescente. Las mismas serán presentadas en la próxima Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo CIPD, conocida como Cairo+20.
Según la OMS en Costa Rica, Panamá y el Paraguay, se registran los índices más altos de maternidad indígena. De cada diez jóvenes, cinco de ellas son madres a temprana edad.
En el Perú, se presume que los índices más altos de embarazo adolescente se registran en la Amazonía. De acuerdo al último censo nacional, de entre todos los pueblos indígenas, el 39.2% de las mujeres amazónicas ya son madres entre los 15 y 20 años.
Tania Pariona, lideresa de la organización juvenil Ñuqanchik de Ayacucho, señaló que las políticas de prevención se orientan a distribuir anticonceptivos o a realizar charlas informativas, pero sin una metodología adecuada para poblaciones indígenas.
“Por ejemplo, la educación sexual no puede ser incluida como parte del currículo educativa sin contar con docentes o personas formadas en la materia. A veces los maestros no saben cómo abordarlo”, explica.
Según las Naciones Unidas, datos más precisos y completos sobre el embarazo adolescente entre la población indígena, y su situación de salud en general, siguen siendo difíciles de obtener. Al ser invisibles en los censos nacionales, las brechas de salud, en comparación con otros grupos, continúan ocultas.
El embarazo adolescente es también resultado de la violencia sexual. Las mujeres indígenas en América Latina y El Caribe viven en situaciones de conflicto armado en donde este tipo de agresiones son frecuentes. La presencia de compañías extractivas dentro de sus territorios las hace también vulnerables a la trata de personas para la explotación sexual.
La migración hacia las ciudades también contribuiría a incrementar las cifras. Pariona señala que las jóvenes indígenas que se desplazan a las urbes están solas y no cuentan con ninguna red de soporte. “Sin embargo, dentro de las familias indígenas no se hablan estos temas y las jóvenes no tienen una buena orientación”, cuenta.
El Día Mundial de la Población tiene como fin reflexionar sobre la necesidad de incentivar la reflexión sobre las características y los problemas de la población mundial, como su demografía, y acceso a servicios básicos como la salud y la educación.
Este año está dedicado a la prevención del embarazo adolescente. En un mensaje público, el director ejecutivo del Fondo de Población de las Naciones Unidas, Babatunde Osotimehin, solicitó a los gobiernos y la comunidad internacional el tomar las medidas necesarias para lograr que cada mujer joven pueda tener una educación sexual apropiada, que le permita cumplir con todo su potencial humano.
La CIPD es una reunión periódica convocada por la ONU en la que los países evalúan los avances en la implementación del Programa de Acción de la Conferencia Internacional de Población y Desarrollo.
Entre sus objetivos se encuentra la promoción de la salud y los derechos reproductivos, la equidad de género y el empoderamiento de las mujeres por parte de los Estados. Su próximo proceso de revisión se llevará a cabo en la ciudad de El Cairo, en Egipto en 2014.
Los participantes de la cita en Lima son líderes jóvenes de las organizaciones integrantes del Enlace Continental de Mujeres Indígenas de las Américas ECMIA.
La reunión forma parte de la Jornada Internacional “Pueblos Indígenas y Derechos”, que se lleva a cabo hasta el 13 de julio con la presencia de reconocidos líderes de las organizaciones y redes indígenas más representativas de América Latina y El Caribe.
Esta es organizada por CHIRAPAQ, Centro de Culturas Indígenas del Perú y el Enlace Continental de Mujeres Indígenas de las Américas ECMIA, con el apoyo de la Fundación Ford y el Fondo de Población de las Naciones Unidas UNFPA.
