TRÁFICO DE MENORES
Extraído del Diario El Comercio.
Puesto de frontera peruana no protege a los niños que cruzan solos hacia Ecuador. En el 2010 hubo 150 niños desaparecidos. Existe tráfico laboral y sexual en bares
Por: Milagros Rodríguez Corresponsal
En Machala, capital de la provincia ecuatoriana de El Oro, ubicada a 90 km de la frontera con el Perú, (el menor a quien llamaremos) Agustín vende palta, limón y mango en el Mercado del Sur, uno de los tres principales centros de abastos de esta zona. Agustín tiene 14 años y dice que obtiene 140 dólares diarios, pero que todas sus ganancias se las entrega a la abuela.
‘La abuela’ es Regina Chumacero Ramos, quien no tiene afinidad sanguínea con él, pero le chupa la sangre. Chumacero admitió a este Diario que viajaba todos los días a Ecuador porque la economía en Tumbes es mala; y no tuvo vergüenza en confesar que llevaba 8 niños cada día al país vecino. “Pero no soy la única que lleva menores”, reveló la mujer, quien dice que los niños ya son conocidos en la ruta y nadie los interviene. Y es que los controles de migración dejan mucho que desear. El Comercio fue testigo de que, quien no tiene papeles, paga 5 o 10 dólares para la ‘colita’ (gaseosa) y está solucionado el problema.
TRÁFICO VERGONZOSO
En teoría, para ir a Ecuador basta con tener una Tarjeta Andina Migratoria (TAM) que otorga Migraciones del Perú; y luego, en el país del norte se sella el ingreso en tarjetas similares. Para que los menores de edad viajen tienen que estar sus padres, caso contrario deberán contar con un permiso notarial. Sin embargo, a pesar de estas normas binacionales y de los esfuerzos de Reniec por promover el DNI para infantes, en el 2010 se denunció la desaparición de 150 menores, y de ellos 135 fueron encontrados en bananeras y camaroneras, como mendigos, vendiendo golosinas y, lo peor, atendiendo en cantinas o night clubs.
Pese a esta cruda situación, lo más indignante es que, según el Poder Judicial, no hay un solo caso de trata de personas, a pesar de que el Ministerio Público ya ha presentado 119 expedientes de familia tutelar y 8 denuncias de tráfico de menores.
El jefe de Migraciones en Zarumilla, Segundo Reyes, afirma que diariamente salen de 4 a 10 menores hacia Ecuador, pero aclara que su estimación se basa en una muestra aleatoria, pues basta subir a un ómnibus que cubra la ruta Huaquillas-Ecuador para darse cuenta de la alta cifra de niños que viajan hacia Arenillas, Santa Rosa y Machala.
El Comercio recogió la versión de los ‘llenadores’ de las empresas de transporte ecuatorianas, quienes refieren que a las 6 a.m. salen menores peruanos llevando cebolla, ajos, golosinas y otros productos que venden en la provincia de El Oro y a las 6 p.m. retornan a sus hogares. Generalmente son de Aguas Verdes, Zarumilla y Tumbes.
EN BARES Y NIGHT CLUBS
(La menor a quien llamaremos) Esther llegó al albergue Medalla Milagrosa, en Tumbes, luego de que fuera ubicada en el night club Las Celis, en agosto del 2010. Solo tenía 16 años y ya prestaba servicios de dama de compañía. La adolescente no quiso denunciar a nadie. Pero en las investigaciones de la PNP se supo que su hermana mayor vive con un ecuatoriano, dueño de un bar, que serviría de base para el tráfico de menores. “Yo quería juntar dinero para postular a una universidad, porque quiero estudiar Derecho” fue lo que dijo Esther. El fiscal de Familia en Zarumilla, José Fiestas Jaramillo, dice que ni los menores ni sus padres denuncian la explotación, las víctimas refieren que fueron por su propia voluntad o inventan versiones que se durmieron en el ómnibus y terminaron en Ecuador.
PADRES CÓMPLICES
El jefe policial de Personas Desaparecidas de la PNP, Miguel Wong, informó que solo en el 2010 hubo 135 niños recuperados de las 150 denuncias de desaparecidos. En enero del 2011 ya iban 7 denuncias, pero no todos los casos son registrados. “Hay padres que son indiferentes a la desaparición de sus hijos, como sucedió con tres menores de Chimbote y otro de Chiclayo, quienes fueron entregados por la policía ecuatoriana, al haberlos encontrado en diversos trabajos”, cuenta Wong.
Los niños de Chimbote fueron hallados en Quito, el de Chiclayo en Huaquillas (Ecuador), pero los padres no habían denunciado la desaparición, ni se mostraron interesados en recuperar a sus hijos cuando se enteraron que habían sido repatriados.
Efraín Saavedra Barrera, cónsul del Perú en Machala, nos acompañó a recorrer esa ciudad y nos mostró los tres centros de abastos y calles principales donde se encuentran niños mendigando. Saavedra cuenta que descubrieron a una señora de 60 años que recorría los pueblos fronterizos peruanos y reclutaba jóvenes de 14 a 16 años. Primero conquistaba a los padres con regalos y luego convencía a sus hijas de llevarlas a Ecuador, porque allí iban a ganar en dólares. Con lo cual, deduce también el diplomático, es condenable la complicidad entre los padres y los traficantes de menores.
El cónsul peruano afirma que el objetivo de este rescate es identificar caso por caso la trata de pequeños, ya que en Machala hay un gran movimiento económico en 120 mil hectáreas dedicadas al cultivo de langostinos y a las plantaciones bananeras, donde se ha denunciado explotación laboral y sexual.
Esto lo confirma el presidente de la Asociación de Peruanos en El Oro-Ecuador, Daniel Salgado, quien reveló que ha aumentado la cifra de niños peruanos en las calles y mercados de Machala en estos últimos años.
CIFRAS
1,2
Millones de niños fueron víctimas de trata o tráfico con fines de explotación laboral o sexual en el mundo. Aunque la Organización Internacional del Trabajo calcula que serían muchos más.
2011
Es el año en que el Perú debe presentar al Comité de los Derechos del Niño de la ONU su cuarto informe de cumplimiento, lo que constituye una oportunidad para tomarse en serio la trata de menores.
Link:
http://elcomercio.pe/impresa/notas/encuentran-135-ninos-trabajando-ecuador/20110206/709475
Extraído del Diario El Comercio.
Puesto de frontera peruana no protege a los niños que cruzan solos hacia Ecuador. En el 2010 hubo 150 niños desaparecidos. Existe tráfico laboral y sexual en bares
Por: Milagros Rodríguez Corresponsal
En Machala, capital de la provincia ecuatoriana de El Oro, ubicada a 90 km de la frontera con el Perú, (el menor a quien llamaremos) Agustín vende palta, limón y mango en el Mercado del Sur, uno de los tres principales centros de abastos de esta zona. Agustín tiene 14 años y dice que obtiene 140 dólares diarios, pero que todas sus ganancias se las entrega a la abuela.
‘La abuela’ es Regina Chumacero Ramos, quien no tiene afinidad sanguínea con él, pero le chupa la sangre. Chumacero admitió a este Diario que viajaba todos los días a Ecuador porque la economía en Tumbes es mala; y no tuvo vergüenza en confesar que llevaba 8 niños cada día al país vecino. “Pero no soy la única que lleva menores”, reveló la mujer, quien dice que los niños ya son conocidos en la ruta y nadie los interviene. Y es que los controles de migración dejan mucho que desear. El Comercio fue testigo de que, quien no tiene papeles, paga 5 o 10 dólares para la ‘colita’ (gaseosa) y está solucionado el problema.
TRÁFICO VERGONZOSO
En teoría, para ir a Ecuador basta con tener una Tarjeta Andina Migratoria (TAM) que otorga Migraciones del Perú; y luego, en el país del norte se sella el ingreso en tarjetas similares. Para que los menores de edad viajen tienen que estar sus padres, caso contrario deberán contar con un permiso notarial. Sin embargo, a pesar de estas normas binacionales y de los esfuerzos de Reniec por promover el DNI para infantes, en el 2010 se denunció la desaparición de 150 menores, y de ellos 135 fueron encontrados en bananeras y camaroneras, como mendigos, vendiendo golosinas y, lo peor, atendiendo en cantinas o night clubs.
Pese a esta cruda situación, lo más indignante es que, según el Poder Judicial, no hay un solo caso de trata de personas, a pesar de que el Ministerio Público ya ha presentado 119 expedientes de familia tutelar y 8 denuncias de tráfico de menores.
El jefe de Migraciones en Zarumilla, Segundo Reyes, afirma que diariamente salen de 4 a 10 menores hacia Ecuador, pero aclara que su estimación se basa en una muestra aleatoria, pues basta subir a un ómnibus que cubra la ruta Huaquillas-Ecuador para darse cuenta de la alta cifra de niños que viajan hacia Arenillas, Santa Rosa y Machala.
El Comercio recogió la versión de los ‘llenadores’ de las empresas de transporte ecuatorianas, quienes refieren que a las 6 a.m. salen menores peruanos llevando cebolla, ajos, golosinas y otros productos que venden en la provincia de El Oro y a las 6 p.m. retornan a sus hogares. Generalmente son de Aguas Verdes, Zarumilla y Tumbes.
EN BARES Y NIGHT CLUBS
(La menor a quien llamaremos) Esther llegó al albergue Medalla Milagrosa, en Tumbes, luego de que fuera ubicada en el night club Las Celis, en agosto del 2010. Solo tenía 16 años y ya prestaba servicios de dama de compañía. La adolescente no quiso denunciar a nadie. Pero en las investigaciones de la PNP se supo que su hermana mayor vive con un ecuatoriano, dueño de un bar, que serviría de base para el tráfico de menores. “Yo quería juntar dinero para postular a una universidad, porque quiero estudiar Derecho” fue lo que dijo Esther. El fiscal de Familia en Zarumilla, José Fiestas Jaramillo, dice que ni los menores ni sus padres denuncian la explotación, las víctimas refieren que fueron por su propia voluntad o inventan versiones que se durmieron en el ómnibus y terminaron en Ecuador.
PADRES CÓMPLICES
El jefe policial de Personas Desaparecidas de la PNP, Miguel Wong, informó que solo en el 2010 hubo 135 niños recuperados de las 150 denuncias de desaparecidos. En enero del 2011 ya iban 7 denuncias, pero no todos los casos son registrados. “Hay padres que son indiferentes a la desaparición de sus hijos, como sucedió con tres menores de Chimbote y otro de Chiclayo, quienes fueron entregados por la policía ecuatoriana, al haberlos encontrado en diversos trabajos”, cuenta Wong.
Los niños de Chimbote fueron hallados en Quito, el de Chiclayo en Huaquillas (Ecuador), pero los padres no habían denunciado la desaparición, ni se mostraron interesados en recuperar a sus hijos cuando se enteraron que habían sido repatriados.
Efraín Saavedra Barrera, cónsul del Perú en Machala, nos acompañó a recorrer esa ciudad y nos mostró los tres centros de abastos y calles principales donde se encuentran niños mendigando. Saavedra cuenta que descubrieron a una señora de 60 años que recorría los pueblos fronterizos peruanos y reclutaba jóvenes de 14 a 16 años. Primero conquistaba a los padres con regalos y luego convencía a sus hijas de llevarlas a Ecuador, porque allí iban a ganar en dólares. Con lo cual, deduce también el diplomático, es condenable la complicidad entre los padres y los traficantes de menores.
El cónsul peruano afirma que el objetivo de este rescate es identificar caso por caso la trata de pequeños, ya que en Machala hay un gran movimiento económico en 120 mil hectáreas dedicadas al cultivo de langostinos y a las plantaciones bananeras, donde se ha denunciado explotación laboral y sexual.
Esto lo confirma el presidente de la Asociación de Peruanos en El Oro-Ecuador, Daniel Salgado, quien reveló que ha aumentado la cifra de niños peruanos en las calles y mercados de Machala en estos últimos años.
CIFRAS
1,2
Millones de niños fueron víctimas de trata o tráfico con fines de explotación laboral o sexual en el mundo. Aunque la Organización Internacional del Trabajo calcula que serían muchos más.
2011
Es el año en que el Perú debe presentar al Comité de los Derechos del Niño de la ONU su cuarto informe de cumplimiento, lo que constituye una oportunidad para tomarse en serio la trata de menores.
Link:
http://elcomercio.pe/impresa/notas/encuentran-135-ninos-trabajando-ecuador/20110206/709475
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