Aumentan casos de trata de personas y sigue alta percepción de inseguridad

Cusco y Piura son las regiones en donde se registra la mayor cantidad de casos a nivel nacional. Aunque la incidencia delictiva ha bajado algunos puntos porcentuales y se han desarticulado organizaciones criminales, la percepción de los piuranos respecto a la inseguridad sigue elevada por los asaltos al paso


07.06.2018 por Diario Correo

Durante los primeros cinco meses de este año, las denuncias por el delito de trata de personas alcanzó niveles similares al registrado durante el 2017, en tanto la percepción de inseguridad mantiene cifras elevadas, pese a la desarticulación de organizaciones criminales por parte de la Policía y el Ministerio público.

Según las cifras del último informe del INEI (Instituto Nacional de Estadística e informática), basados en las denuncias hechas en el Sistema de Registro y Estadística del Delito de Trata de Personas y Afines de la PNP (RETA), de enero a mayo se registraron 14 casos, dos menos de los que se presentaron durante todo el año 2017. En el 2016 ocurrieron siete casos, y en el 2015, 15 casos.

Según resalta el INEI en su informe, entre enero y mayo del 2018 se han registrado 64 denuncias en todo el país, siendo el departamento de Piura y Cusco donde se registraron más de diez denuncias.

Por su parte, el Ministerio Público atendió un total de 58 casos por este delito que se presenta principalmente en bares y cantinas de las ciudades portuarias como Paita y Sechura, y en las zonas donde prolifera la minería ilegal e informal como Las Lomas, Suyo y Tambogrande, así como en Morropón, Sullana, y los balnearios de Talara.

INSEGURIDAD. Respecto a la incidencia delictiva, el INEI señala que en la provincia de Piura, el 21% de los casi 800 mil pobladores mayores de 15 años indicó haber sido víctima de algún hecho delictivo entre noviembre del año pasado, y abril de este año. Durante todo el año pasado, el 25.3% de la población de Piura señaló haber sido víctima de un delito.

Sin embargo, pese a esta ligera disminución de actos penalizados, la percepción de inseguridad de los piuranos se mantiene alta. A nivel de toda la región, el 80.8% afirmó sentirse inseguro, mientras que el 87.2% de los pobladores de la provincia de Piura, manifestó sentirse inseguros.

IMPACTO. Para Eduardo Arbulú, titular de la Orsydn (Oficina Regional de Seguridad y Defensa Nacional) del Gobierno Regional de Piura, las captura de organizaciones criminales, si bien tienen un impacto en la reducción de la delincuencia, la lectura del vecino de a pie es diferente.

Agrega que más impacto tiene para él, el robo o arrebato de sus bienes que con tanto esfuerzo ha conseguido, y esto lo expresa con sus vecinos que hacen suyo la indignación y miedo a ser también víctimas de un hecho delictivo, y asume que hay inseguridad.

“Tiene más impacto el arrebato que la desarticulación de bandas organizadas, porque el robo de callejero que puede terminar en muertes, generan inseguridad”, acotó Arbulú.

Indicó que la Policía ha puesto también en la mira la delincuencia común, pero para ello también las municipalidades deben sumarse en erradicar los lugares donde venden artículos robados como el conocido “Tacorita”.

“Todos estos centros de acopio tienen que ser erradicados, porque el delincuente también trabaja de acuerdo a la oferta y la demanda, porque tiene pedidos, de celulares, lap top, computadoras”, señaló el funcionario regional.

De la misma opinión es el regidor Luis de la Puente, presidente de la Comisión de Seguridad de la Municipalidad de Piura, quien criticó a la comuna por no tener una capacidad de respuesta a través de las acciones de control, y cumplir con las exigencias de la población.

Agregó que la percepción de inseguridad también se manifiesta cuando la población llama al Serenazgo, y no acude o no atiende las llamadas.

A esto se suma, dijo, la poca conciencia que tiene la población de lo que es seguridad, porque no están organizados para enfrentar cualquier situación, o reaccionar para poder defenderse, y esto va porque hay poca solidaridad entre los vecinos.

Arbulú Gonzales dijo que no hay que darle tregua a la delincuencia, los centros de acopio y de venta de productos robados o de dudosa procedencia deben ser erradicados de raíz, para ello debe haber un trabajo articulado entre la Policía y los gobiernos locales.

“Lo están haciendo pero deben hacerlo en forma constante. Ahí donde venden cosas robadas hay que erradicarlos sin temor alguno, creo que esa es la forma de actuar”, dijo.

Respecto a la trata de personas, el regidor De la Puente indicó también que la comuna debe actuar también en forma más radical.

“La reducción de horarios no ha cambiado nada, no se controlan los locales porque no hay personal, y tampoco presupuesto para invertir, porque todo está ocupado en la reconstrucción”, manifestó el concejal de la municipalidad de Piura.
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